Las proporciones de materia en el cosmos el hidrógeno tiene el setenta por ciento en masa y 90 por ciento por cantidad de átomos.
Se le llama átomo al hidrógeno, que no es más que un neutrón descompuesto, tiene un comportamiento totalmente diferente a los demás átomos.
El deuterio debiera considerarse el primer átomo, al incorporar un neutrón al núcleo, pero al no resistir la fusión nuclear que lo destruye, solo es un escalón para llegar al helio.
Animación de un átomo de deuterio
El Helio, es realmente el primer átomo, responde a una composición estable, a partir del cual se van conformando los sucesivos átomos, como el carbono que es siguiente estable en la escala, que se conforma con tres helios.
En la imagen siguiente se observa la energía de enlace por nucleón para isótopos comunes. En el helio esta energía es significativamente mayor que en los núclidos adyacentes.
La importancia del helio se pone de manifiesto en los elementos con cantidad de protones pares.
En el núcleo del helio se esconde el secreto del comportamiento del átomo, del tal solidez que los elementos radiactivos se descomponen por núcleos de helio.
Casi todo el helio presente en la Tierra es el resultado de la desintegración radiactiva como partículas alfa expelidas por este proceso.
El berilio y el litio son inestables y se resuelven de inmediato después del nacimiento, en principio los existentes son consecuencia del decaimiento del carbono
Para el nacimiento del helio son necesarios cuatro hidrógenos, por tanto en el 10 por ciento de helio equivale a cuarenta por ciento de hidrógenos contra los noventa propiamente de hidrógeno que compone la existencia total del cosmos.
En cada átomo de hierro se invirtieron 52 de hidrógeno, por supuesto algunos más para los isótopos.
En las nebulosas de abundante polvo y materia molecular seguramente siguiendo el análisis relacionado el hidrógeno se encontrará en minoría.
Como en lo personal, descreo de un punto de partida diferente a la simple descomposición del neutrón que da lugar al movimiento y por tanto al calor que arrastra a otros neutrones, estimo que la proporción de hidrógeno existente es el del equilibrio, los átomos tienen un período de vida limitado, a partir del cual se produce su decaimiento para terminar resolviéndose en hidrógeno y de allí un nuevo comienzo en el eterno proceso cíclico.